La arquitectura tiene un proceso, los diseño no salen de la noche a la mañana!, pueden durar dias, meses, años hasta que se logre el diseño, no perfecto, pero el mas adecuado para lo que queremos transmitir.
Frank Lloyd Wright nos sirve de ejemplo para ese proceso con su obra de arte para obras de arte, el museo de Guggenheim. Su resultado se debio a la ampliacion de dicho museo en los años 50's.
Al principio no fue el mas alabado de los proyectos justamente porque parecia no cumplir lo que estuve hablando en los otros posts: la coordinacion con su entorno. Muchos pensaban que estaba un poco fuera de contexto en cuanto a su diseño en comparacion a los grandes bloques de rascacielos y edificios que son tan caracteristicos en la ciudad de Nueva York... pero en mi bastante humilde y poco experimentada opinion, no fue asi....
El edificio no tendra la misma forma que los que estan adjuntos a el, sin embargo conserva su similitud por medio de otros factores, como los materiales y los colores utilizados para su fachada. Ademas hay que tomar en cuenta su ubicacion, que es en una esquina, me parece que la forma en espiral y sus paredes con esquinas redondas ayudan a suavizar estas esquinas.
En la clase de Introduccion a la Arquitectura nos mostraron unas imagenes de el proceso del diseño de este edificio. Yo siempre hice mis diseños primero en plano y luego los cortes, elevaciones, etc...esa es la verdad, y luego vi que estuve cometiendo un error. Un espacio es tridimensional, no bidimensional. Lloyd, para hacer este diseño, se baso primero en bosquejos tanto del interior como el exterior, la fachada, la forma y los distintos matices de los ambientes del museo surgieron poco a poco de forma que cada dibujo perfeccionaba el dibujo anterior, cada corte perfeccionaba el espacio, y como consecuencia de esa vision plasmada en un papel, surgían los planos. Asi se logro tener una vision de que causara la forma en el interior. Las espirales, siendo un area de circulacion y la parte mas atrayente del diseño de la fahcada, tambien son lo que forma el recorrido en el museo, y donde se ubican las exposiciones que gracias a este diseño, se logra un camino fluido hasta el final de la exposicion.